¿Qué es el Paludismo?
El Paludismo o Malaria es una enfermedad causada por parásitos del género Plasmodium que infectan los glóbulos rojos de la sangre o eritrocitos. El parásito ingresa a la sangre de una persona a través de la picadura de un mosquitos infectados, que generalmente se encuentran en zonas tropicales de todo el mundo.
El paludismo puede producir anemia e inflamación del hígado y el bazo.
Si la infección no se trata a tiempo, pueden presentase complicaciones hasta llegar a un cuadro severo, afectar otros órganos y en algunos casos provocar la muerte. El Paludismo se transmite exclusivamente por la picadura de mosquitos hembras (vectores) del género Anopheles.
La intensidad de la transmisión depende de factores relacionados con el mosquito, el parásito, la persona infectada y el medio ambiente.
La transmisión del paludismo se ubica en diez entidades federativas, Chiapas, Oaxaca, Quintana Roo y Tabasco en el sursureste y Chihuahua, Durango, Jalisco, Nayarit, Sinaloa y Sonora en el noroeste.
Signos y síntomas
Los síntomas son muy variados, empezando con fiebre, escalofríos, sudoración y dolor de cabeza. Además se pueden presentar náuseas y vómitos, tos, heces con sangre, dolores musculares, ictericia (piel amarilla), defectos de la coagulación sanguínea, shock, insuficiencia renal o hepática, distrés respiratorio, ruptura de bazo, trastornos del sistema nervioso central y coma.
Diagnóstico
Existen varias formas de diagnosticar el Paludismo, la más común y precisa es por medio de un examen parasitoscópico el cual consiste en la recolección de algunas gotas de sangre (de alguno de los dedos de la mano) que se tiñen con reactivos especiales y se observan en un microscopio, buscando la presencia de los parásitos.
También existen algunas otras pruebas diagnósticas como las tiras reactivas y las pruebas serológicas.
Prevención y tratamiento
Con la finalidad de reducir el riesgo de contraer el Paludismo, la OMS recomienda algunas estrategias básicas, como es el uso de mosquiteros tratados con insecticidas (MTI), así como el rociado de insecticidas (no tóxicos para el humano) dentro de los domicilios y espacios cerrados en donde vivan o trabajen personas y la eliminación de cuerpos acumulados de agua como charolas, llantas de auto, cisternas abiertas etc. Esto evita la proliferación de los mosquitos que transmiten al parásito.
Otra de las acciones importantes que se deben tener en cuenta para reducir el riesgo de contraer Paludismo es evitar en lo posible acudir a zonas en donde se sabe existen focos rojos de Malaria o Paludismo y de ser necesario acudir a dichas zonas, utilizar ropa que cubra brazos y piernas, así como el uso de algún repelente de insectos efectivo.
A nivel mundial el Paludismo es un problema serio de salud pública, por lo que diversas entidades nacionales e internacionales están creando un compromiso de alto nivel para lograr un mundo sin paludismo y la generación de estrategias fundamentales reducir la carga de la enfermedad y alcanzar los objetivos mundiales relativos al caso.
De tal manera que cuando exista la sospecha de alguna enfermedad, es recomendable acudir a una institución de salud para recibir atención inmediata de un especialista, el cual realizará un diagnóstico y determinará el posible tratamiento ante la enfermedad.
Comments